Te agobias
cuando tienes sueños raros, me los cuentas en cuanto me ves, como si tuvieras
la necesidad de que te dijera que todo está perfecto… Ya te he contado mi sueño, y ya me he quedado
tan a gusto. Si se lo contaras a la Terapeuta de los Mochos, te diría…”eso, es
bueno”.
Tenía una granja de flamencos, estaba muy
agobiada porque tenía que darles de comer. No tenía tiempo, siempre tengo
muchas cosas que hacer. De mi armario salían ruidos raros, pensaba que era una
rata, pero luego resultó que era un gato. Un gato en mi armario, la culpa es mía porque lo tengo todo muy desordenado, creo que soy la peor ama de casa del
mundo. Sofía también estaba, aunque no tengo muy claro por qué. De repente el
agua empieza a subir, me llega por la cintura, quiero alcanzarte pero no puedo,
no sé de dónde ha salido el agua, pero ahora hay agua. Logro alcanzarte, te
abrazo……… y ya no hay agua.
Yo no sé como
interpretar el sueño, pero:
-
Los
flamencos comen solos.
-
Tu
armario está desordenado pero no tanto…
-
Sofía
siempre está. Es un referente en nuestra vida.
-
Si el
agua sube, nadas un poco.
-
Si no
puedes alcanzarme, en el próximo sueño te coges las aletas.
-
Anda …
dame un abrazo.
TH. 2013.
PD: ¿Te
acuerdas de la de los abrazos gratis del otro día?
PD: A ti te parece
una buena idea, pero me quería abrazar a mi… Y yo no abrazo a desconocidos. Ni
gratis, ni ná…
Los perros quieren olerte, los transeúntes abrazarte, los niños quieren jugar contigo...claro, que yo lo entiendo! a mi me pasa lo mismo!
ResponderEliminarAnda perraca.....
ResponderEliminar