sábado, 11 de febrero de 2012

Sirenas. Ángel Gonzalez. Valeria Docampo.




En un acantilado solitario,
una noche de junio,
a la luz difusa del plenilunio,
presencié un episodio extraordinario.
A mi vera,
dos sirenas de cuerpo adolescente
y larga cabellera
surgieron de las aguas de repente
y empezaron a hablar de esta manera.

- Ola, ola, ola, ola.
-¿Qué ola tienes tú?
- Tres delfines y mero.
-Vas atrasada un barbo y siete ostras.
- ¿Tienes alga que hacer?
- No tengo nalga pero traigo cola.
-Podríamos acercarnos
de aquel barco velero hasta la popa
y cantar a dos voces las canciones
que a las tripulaciones vuelven locas.
- Es divertido ver a los marinos
arrojándose al agua por la borda,
pero ahora estoy citada
con un tritón barbado que me ronda.
- Entonces, nada, nada, nada.
Volveré a verte dentro de una ola.
-Si no voy,
te dejaré un mensaje en una caracola.
- Y qué mas?
- Solo sal.
-Y tú sal sola.
- Ola, ola y adiós.
- Adiós y ola, ola, ola.

Así se despidieron, y nadando
no sé hacia qué marítimos confines,
se fueron las sirenas alejando
escoltadas por ágiles delfines.
Yo me quedé pensando:
si les hubiese dado por cantar
habría tenido que tirarme al mar.


Ángel González la poesía.
Valeria Docampo las ilustraciones.

3 comentarios:

  1. Les damos las gracias a Ángel González y A Valeria Docampo por este poema tan bonito que nos han dedicado.

    ResponderEliminar
  2. La lagartija está encantada con el poema, su cerebro reptiliano ha memorizado el poema... y tengo que decirle la hora de modo sirénido y cosas así, si lo hago mal se enfada... Es mitad de mes, a mitad de mes siempre se vuelve loca. Eso dice ella.

    ResponderEliminar
  3. Pero el libro y los dibujos son preciosos. siempre que veo algo así, pienso lo mismo... Este libro lo han hecho para alguien... En el fondo, lo han hecho para que les quieran... Es algo que uno siente cuando pasa las páginas.

    ResponderEliminar