Baloncesto

He tirado muchas veces a canasta.
He fallado la mayoría de las veces.
Y he colado algunas, no demasiadas.

Me han pitado falta técnica.
Y también falta personal.
Y he abandonado el campo por acumulación de faltas.
Siempre me lo merecí.

He aprendido a abandonar el campo
con la cabeza baja
y a ocultar las lágrimas.

He defendido la zona debajo del aro.
Y también he defendido de modo individual
y siempre he tenido ganas de morirme.

He jugado en el campo
y he jugado en el banquillo
y he sabido
que siempre hay gente peor
y también mejor que yo.

He sentido,
digan lo que digan,
que en algunos momentos del partido,
determinadas personas
son imprescindibles
al menos si tienes intención de encestar.

Y he aceptado
que cuando el silbato suena 3 veces
el partido termina
y te toca saludar a los contrarios
y a los propios,
suceda lo que suceda.

TH. Marzo 2012.

PD: Y mucho más.