Me dice la esteticista, que no entiende muy bien por qué me depilo las axilas, que tengo sólo 3 pelos. Le digo que es verdad, y que ya lo sé, pero que no me queda otro remedio que depilarme y le cuento tu historia. La historia de los 3 pelos.
La historia, es que nado un par de días por semana con una amiga mía que está loca, y entre sus trastornos obsesivos está la observación de mis axilas. Tengo 3 pelos, y ella se ha encargado de ponerles nombre. Se llaman, Nakata, Pochiko y el primo de Nakata. En cuanto les ve se echa a reír. Esto me preocupa por dos motivos: Primero, descentra mi entrenamiento deportivo, y segundo, en uno de sus ataques de risa es probable que un día se me ahogue. Es cierto que está loca como un cencerro, es cierto también que se ríe de mis 3 pelos y no debería, pero también es cierto que su locura equilibra mi alma, y que su risa sabe a pan con mantequilla y café.
TH. Marzo 2012.
PD: Te llamo para preguntar si nadamos mañana y para contarte, con aire triunfal, que me he depilado. Te enfadas. “La próxima vez me avisas, no he podido despedirme debidamente de ellos, les hubiera estrechado la mano, o les hubiera dado un último estironcito”. Lo dicho… COMO UN CENCERRO!!!!
PD: La luna esta realmente hermosa. Pinto un poco.
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