Aunque mis ojos ya no puedan ver ese puro destello
que en mi juventud me deslumbraba
aunque nade pueda hacer volver la hora del esplendor en la hierba,
de la gloria en las flores,
no debemos afligirnos,
pues encontraremos fuerza en el recuerdo,
en aquella primera simpatía que,
habiendo sido una vez, habrá de ser por siempre,
en los consoladores pensamientos que brotaron del humano pensamiento
y en la fe que mira a través de la muerte.
Gracias al corazón humano, por el cual vivimos,
gracias a sus ternuras, a sus alegrías y a sus temores,
la flor más humilde, al florecer, puede inspirarme ideas que,
a menudo,
se muestran demasiado profundas para las lágrimas.
William Wordsworth .Poems in two volums (1807)
PD: La foto es de Nickanónimo.
FELISA FERRAZ. I FESTIVAL PIRINEO LITERARIO
Hace 1 año
No hay comentarios:
Publicar un comentario