Por los suelos del barrio

Ella no se lo cree, pero yo ayer, a 30 kilómetros, estuve a punto de hacer la misma foto. Pero no la hice.La hizo ella. Pero me hace gracia el pensamiento sincronizado.

Momento jacaranda

Si es de ayer, no vale

Tiene que ser de hoy.
Blando, crujiente, tierno, aromático.
Preferiblemente caliente.
A mi me gusta así,
aunque me queme los labios y la boca
aunque me arda la tripa.

Siempre de hoy.
Puede ser de muchas formas:
barras, baguetes, chapatas,
hogazas, pulguitas, bollitos,
rollitos, cangrejos, roscos,
blancos, morenos, integrales,
especiados, candeales,
con frutos secos, con pasas o
con 5 cereales.

Distinto… pero básicamente siempre igual.
Harina, agua, levadura
y un paseo lento por el horno.
Su olor es inconfundible…

Tiene que ser de hoy.
El de ayer, no vale.
El de ayer, no sabe,
El de ayer está seco,
No tiene olor,
No te llena la boca de agua.

Tiene que ser de hoy.
De cada día…
El pan, como el amor, si son de ayer, no valen.

TH. 2010.

PD: Los optimistas me hablarán de las torrijas, de los picatostes, del pan rallado y del pan de molde… Pero no es comparable. Si no es de hoy… NO VALE.

Camino en sepia

Preciosos chorlitejos

Martes por la tarde

Aproveché y actualicé el blog. Arreglé (o cambié de sitio..) algunos papeles. Pero lo mejor de ese martes por la tarde fueron estas fotos. Al menos para mí...

Adicta al finibum

¿Lo conocen? Son unos caramelos rojos, con forma de bola y con polvo ácido en su interior.
Cuando el ácido se deshace en la lengua te provoca un escalofrío.
Los finibunes me recuerdan a los besos en el cuello. Los besos en el cuello producen una especie de escalofrío que te recorre el cuerpo.
Dice mi terapeuta de los Mochos (que por cierto, es sexóloga) que cuando te besan en el cuello, se activan una gran cantidad de puntos nerviosos, y que un relámpago sexual te cruza el cuerpo diagonalmente. El recorrido es, cuello- hombro- pechocruzandoelpezón- ombligo- zona pélvica- pierna- dedo gordo del pie.
Los besos en el cuello son bonitos. Son relámpagos.
Los finibunes se parecen a los besos en el cuello, pero no son igual.
Yo creo que soy adicta al finibum. O a lo mejor, simplemente, estoy falta de besos.

TH. Junio 2010.